miércoles, 22 de agosto de 2012

Haciendo deporte con nuestros perros

Salir a correr con nuestro perro está empezando a ser cada vez más habitual en nuestro día a día. Muchos de nuestros canes necesitan ejercicios y deportes para estar en forma. Sirven como estimulación física y mental. Un perro activo ladra menos, hace menos travesuras y se porta mejor porque agota energía. Además, ¿qué mejor compañía para hacer ejercicio que con nuestro mejor amigo, el perro?
 

 
 
 
Sin embargo, hay que tomar ciertas precauciones con nuestra mascota, por su propio bien y por el bien de los demás.
 
Lo primero de todo es consultar con nuestro veterinario si nuestro perro está en buenas condiciones físicas para empezar un entrenamiento, requiriendo un previo chequeo médico y de consejos expertos según el tipo de raza de que se trate, de la edad del animal, que podría ser demasiado joven o viejo.
 
 
 
 
Tras el beneplácito del veterinario, debemos empezar a realizar un entrenamiento suave y durante un breve período de tiempo, ya que nuestro perro ha de acostumbrarse a este nuevo ejercicio físico. Poco a poco, ya iremos aumentando velocidad, kilometraje y tiempo. Tenemos que evitar que nuestro can acabe extenuado o lesionado.
 
Nosotros aconsejamos correr con nuestro perro atado debidamente, para evitar posibles molestias a otras personas que pudiéramos encontrar en nuestra carrera, así como maniobrar con facilidad y reaccionar más rápido ante supuestos peligros. Hay que enternarle para que corra sin tirar de nosotros, algo que acabará haciendo de forma intuitiva, y no debemos olvidar llevar algo de agua para reponer líquidos durante todo el trayecto. Esto es fundamental, ya que los perros han de hidratarse con frecuencia.
 
 
 
 
Por supuesto, también tenemos que tener en cuenta la época del año en que salimos a correr y las mejores horas para realizar el ejercicio, para evitar golpes de calor innecesarios. Por ejemplo, en invierno, con el frío, el perro agradecerá cualquier hora para salir a hacer ejercicio, aunque os aconsejamos realizarlo por la mañana, ya que es la mejor hora porque estamos más receptivos y despejamos mejor la mente.
 
 
 
 
En verano, por el contrario, tenemos que tener más precauciones. Con calor, sofoco o bochorno, os aconsejamos salir a correr a primera hora de la mañana o a última hora de la tarde, casi entrando en la noche, pues son las horas de menor calor. Hay días que, incluso, os aconsejamos evitar salir a hacer deporte con vuestros canes, pues la temperatura es elevada y no merece la pena arriesgarse.
 
 
 
 
Después de realizar la carrera y antes de beber agua, siempre aconsejamos esperar un poco hasta que el ritmo cardíaco de nuestro perro se ralentice, ya que beber demasiado excitado podría provocarle vómitos y malestar.
 
Cuando llevemos un tiempo corriendo con nuestra mascota, podemos incluso salir a correr con ella en la bicicleta. Hay arneses especiales para las bicicletas y nuestros perros.
 
 
 
 
Por supuesto, también podemos realizar otro tipo de deportes con nuestro perro, igual de apasionantes y divertidos. Hay un abanico de posibilidades, dependiendo de la raza, edad, entrenamiento deseado,...
 
Agility. El agility es el deporte canino que más popularidad ha cobrado en los últimos años. Es como una variante canina de las pruebas de equitación y, de hecho, su creador era una aficionado a las pruebas hípicas.
 
 
 
 
Schutzhund. Uno de los deportes caninos más antiguos y populares. El schutzhund exige mucha concentración, esfuerzo y colaboración entre el perro y su guía.  Las tres secciones del schutzhund son: obediencia, rastreo y protección.
 
 
 

 
Freestyle canino: baila con tu perro. El freestyle canino o dog dancing es uno de los deportes caninos más recientes, sino el más reciente. Fascinante y cautivador, consiste en presentar una coreografía musical entre perro y dueño. Es uno de los deportes caninos más difíciles, ya que lleva al extremo la creatividad y las habilidades de los adiestradores.
 
 
 
 
Mondioring. Uno de los deportes caninos más completos para perros, puesto que potencia sus cualidades genéticas y físicas, a la vez que forma ejemplares sanos y equilibrados. Esta disciplina se basa en pruebas de obediencia, salto y defensa.
 
 
 
 
Frisbee o Disc dog. El deporte canino más espectacular. Si de verdad quieres estar a la moda y llamar la atencióncon tu perro cuando vas a la playa, al parque o durante un día de campo, entonces el plato volador –disco plástico plano mejor conocido en algunos países como frisbee– es tu pasaporte al estrellato. En este deporte es importantísimo enseñar a nuestro perro a caer.
 
 
 
 

Drafting. Es un deporte también conocido como prueba de arrastre. Los perros, que han funcionado a través de la historia como perros de tiro, han de medir la capacidad de transporte y arrastre.
 
 
 
 
Flyball. Consiste en dos equipos de cuatro perros cada uno, compitiendo por desarrollar una carrera en el menor tiempo posible, sin faltas. El primer perro sale de la línea de inicio y debe recorrer una distancia de aproximadamente quince metros hasta una caja, la que debe golpear con sus patas para que libere una pelota de tenis. Con ella en su hocico, el perro debe volver al punto de partida, de donde saldrá el segundo perro del equipo y así hasta el cuarto perro.
 
 

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Herding. Pastoreo. Actividad de pastoreo no necesariamente requerida como actividad real de trabajo, sino como deporte para preservar los talentos y habilidades de las razas de pastoreo.
 
 
 
 
Kórung. Se realizan dos pruebas. La primera, es una evaluación general: peso, medidas, carácter. Los perros que no permiten esta evaluación son descalificados. Después, se realiza una prueba de disparo. Se realizan disparos al aire a una distancia de 15 a 20 metros y si el perro demuestra temor se descalifica. Ejercicio de protección y coraje: con un figurante. El perro debe morder firme y, cuando el figurante se detiene, debe soltar a la orden del guía. La segunda prueba comprende una carrera directa hacia un figurante. A indicación del juez, el figurante debe atacar al perro y éste debe responder con una mordida firme y completa. A la orden del juez, el figurante detiene la lucha y el guía da la orden de soltar y vigilar al figurante. La clasificación del perro determinará si el perro es o no recomendado para la cría.


 
 
Test de resistencia AD. La prueba consiste en recorrer 20km a una velocidad de 12-15km/h. El perro debe ir trotando al lado de su guía, que va en bicicleta. El recorrido se divide en tres tramos, con recesos. El juez, en cada descanso, verifica que el perro se encuentra en condiciones de continuar. Examina almohadillas, fatiga, deshidratación y estado general. Terminado el último descanso, se debe realizar una pequeña rutina de obediencia, para evaluar la integridad mental. El terreno debe ser de variados tpos: césped, tierra, cemento,...
 
 

 
Mushing. Milenario, en el trabajo que realizaban los perros de trinero en América del Norte y Siberia, como perros de carga y tracción. La carrera discurre durante mil millas. Puede realizarse el recorrido en 10-12 días, pudiendo llegar los últimos a los 22 días.
 
 
 
 
Pulka escandinava. El origen de la pulka escandinava fue como un medio de transporte para poder moverse entre los frondosos bosques escandinavos con mayor facilidad que con un trineo en las labores de caza, pesca y recolección. En la Pulka (Pequeño Trineo entre el perro y el esquiador) se llevarán los aparejos de pesca y caza y los resultados de las capturas. Ésta va unida al perro por un brancal. En la actualidad la pulka debe de pesar el 70 % del peso del perro para las competiciones.
 


 
Canicross. Consistente en correr con un perro atado a la cintura con un cinturón y una línea de tiro que va hasta el arnés del perro. Las distancias a recorrer suelen variar entre 5 y 15 Km. A partir de 20ºC en la sombra, el director decidirá recortar la distancia o anular, dado que los perros pueden sufrir golpes de calor.
 
 
 

Obediencia clase internacional (OCI). Se valora la relación perro-guía y una presentación alegre y precisa. Los ejercicios que componen la prueba son diez, cada uno de ellos con una puntuación diferente: dos de ellos se realizan en grupos (sentados y echados), y el resto de forma individual, como andar "al junto" sin correa, sentarse, echarse y quedarse en pie sobre la marcha. Otros ejercicios pueden ser cobrar un objeto específico o dar indicaciones de echado, de pie o sentado a distancia.
 
 
 
 
 
Y ahora... ¡¡¡A DISFRUTAR CON NUESTRAS MASCOTAS!!!


sábado, 11 de agosto de 2012

Los niños y los perros

Los niños entienden a los perros mucho mejor que nosotros, los adultos, y reconocen en el ladrido del perro multitud de emociones y sensaciones. Sin embargo, esta capacidad normalmente se pierde en torno a los 10 años de edad.




Unos científicos húngaros de la Universidad de Budapest a través de una serie de experimentos con niños y adultos descubrieron este fenómeno. Los investigadores Péter Pongrácz y Сsaba Molnar dejaron a los participantes escuchar varias grabaciones del ladrido canino, les mostraron imágenes que representaban diferentes expresiones del rostro humano y les pidieron encontrar la imagen que mejor se correspondiera con la emoción del fragmento escuchado.
Los niños lo hacían todo correctamente, asociando exactamente en el ladrido la alegría, la preocupación, la amenaza, la propuesta para el juego, el ruego o la expresión de cariño. Los adultos, en cambio, se equivocaban a menudo.





Al trabajar con voluntarios de varias edades, los investigadores determinaron que al cumplir los diez años de edad, los niños empezaban a escuchar el ladrido como una sucesión de sonidos sin sentido, sin poder distinguir por ellos matices emociales o sentimentales por parte de éstos, tal y como pasaba en los voluntarios de más edad.



Para que las personas adultas puedan tener una comunicación más interesante y empática con sus mascotas, los científicos húngaros están desarrollando dispositivos para la “interpretación simultánea” del ladrido de los perros y su traducción a la lengua humana.

Se utilizan programas informáticos especiales que detectan sonidos semejantes por su “carga emocional”. Al analizar más de 6.000 ladridos de 14 razas de perros distintos, que fueron grabados en situaciones determinadas, los científicos garantizan una alta probabilidad de reconocer seis “mensajes” que quieren expresar las mascotas. Son: “¡Atención, un desconocido!”, “¡Pelea!”, “Quiero salir/pasear”, “Quiero compañía”, “Quiero la pelota” y “Vamos a jugar”.




Los investigadores opinan que en la época en la que los perros acababan de ser domesticados, todos los humanos, niños y adultos, entendían bien a sus ‘compañeros’ de cuatro patas. Hoy en día, el programa de “interpretación” del lenguaje canino podría ayudar mucho en el estudio del comportamiento de los perros.

Por otro lado y reconociendo que en ocasiones nos cuesta entender a nuestras mascotas, por un ladrido fuera de lugar o por un comportamiento inexplicable en un momento determinado, aconsejamos un buen adiestramiento básico para proyectar en ellos nuestros "deseos" más sencillos y así sentirnos más tranquilos con nuestros amigos, esas mascotas caninas que tanto adoramos.

Pronto llegará la era de la interpretación del "habla" canina y sí, allí estaremos nosotros, deseosos de conocer esa nueva técnica tan avanzada y tan práctica.

¡Hasta pronto!




sábado, 4 de agosto de 2012

Los perros y el golpe de calor

Con la llegada del verano, el golpe de calor es uno de los principales problemas al que se ven sometidos nuestros perros, ya que son mucho más sensibles al calor que nosotros.




Ellos no pueden regular su temperatura corporal mediante el sudor, como hacemos nosotros. Nuestros perros no tienen glándulas sudoríparas repartidas por el cuerpo, así que eliminan el exceso de calor a través del jadeo y del sudor que expulsan por las almohadillas de los pies y por las zonas aisladas con poco pelo, como puede ser el vientre (nosotros por ellos recomendamos "pelar" a los perros en el vientre a la entrada del verano, para facilitarles la expulsión de ese exceso de calor).





Situaciones más propicias para el golpe de calor

Los golpes de calor pueden venir propiciados en épocas de mucho calor, como es el verano, o en zonas determinadas donde predomine el exceso de humedad. Al igual que a nosotros, sus reservas de sales minerales y azúcares se agotarían. Esto es catastrófico, ya que provocaría un colapso interno en nuestras mascotas, pudiendo provocar su muerte en apenas quince minutos.




Los perros más propensos a los golpes de calor

Al igual que nosotros, los perros más propensos a golpes de calor son los cachorros o los de edad más avanzada.





Igualmente, los perros de capa más oscura son más propensos que los perros de capa más clara.




Por supuesto, además de todas estas características en el perro, también hay ambientes que propician los golpes de calor, como son los lugares reducidos o poco ventilados, como son un coche, un trasportín, un balcón,....




Síntomas del golpe de calor

El perro que sufre un golpe de calor muestra los siguientes síntomas:

- Temperatura elevada por encima de los 42º
- Mucosas rojizas u oscuras
- Su respiración es rápida o costosa: jadeo excesivo
- Se tambalea, estupor (con pérdidas de conciencia)
- Comvulsiones
- Diarrea sanguinolienta
- Vómitos
- Está perezoso y apenas se mueve



Tratamiento

Ante los primeros síntomas, hay que llamar al veterinario de urgencia, mientras otra persona baña al animal con agua. También tendríamos que poner una bolsa de plástico con hielo machacado en la cabeza.




Por debajo de 42º C, no es necesario enfriar más al animal, pues puede llegar a hipotermia.

Sí es importante llevarlo a un sitio fresco y aplicar frío en las zonas más importantes, como son la cabeza, el cuello, las ingles y las axilas. De este modo, refrescaremos la sangre que va hacia el cerebro, evitando un posible daño cerebral, y bajaremos la velocidad de la respiración.

Hay que ponerle cubitos de hielo para que el animal lo chupe y pueda beber el agua fría, pero hay que hacerlo muy poco a poco, sin obligarle.

Aunque el animal baje la temperatura y recobre la conciencia y aparentemente esté normal, no está fuera de peligro, pues los órganos internos pueden estar dañados, por lo que hay que hacer análisis de sangre, para saber si todo el organismo funciona normalmente. El veterinario nos aconsejará cómo proceder después.



Nunca se debería aplicar hielo ni agua muy fría al animal, ya que le provocaría una vasoconstricción  y le hace perder menos calor. Tampoco le debemos cubrir o envolver con toallas, ya que ésto provoca que el calor suba en vez de salir.




Cómo prevenir el golpe de calor

 Para evitar que nuestro perro padezca un golpe de calor, hay que tener un poco de sentido común, es decir:

- Hay que hidratarlo habitualmente y en cantidades pequeñas de agua. Un perro puede vivir unos cuantos días sin comer, NUNCA sin beber. Hay razas específicas que de hecho necesitan más hidratación que otras.




- Sacar a pasear al perro en horas de menos calor, evitando así las horas más críticas, como son de 12h a 17h.

- Si el perro vive en un jardín, facilitarle una zona de sombra para que él pueda cobijarse a su gusto.




- No dejar NUNCA a nuestra mascota encerrada en el interior de un vehículo, JAMÁS, ni si quiera cinco minutos, ya que ese tiempo bastaría para provocarle un daño cerebral irreversible.

- No realizar excesivo ejercicio físico con ellos, sobre todo en determinadas horas, ya que es peligrosísimo para el animal.

- En caso de salir de viaje, llevar agua abundante y -si es posible- algo de hielo por prevención. Si viaje en trasportín, podemos colocar unas toallas húmedas en la base del mismo para conseguir que nuestra mascota esté más fresquita.

Perros más propensos a golpes de calor

Los perros que hacen ejercicio en tiempo caluroso, como el Greyhound, y los perros que tienen el morro chato, como el Bulldog o el Persa, también son más propensos a estos colapsos.