VATICANO.- Todos los perros, gatos, serpientes, arañas, cocodrilos, cuyos, peces dorados y otros animales que hayan recibido un nombre chistoso y amor por parte de sus dueños también podrán llegar al cielo. También los que no nos gustan como las cucarachas, pulgas y piojos. En el cielo no se discrimina a nadie.
O al menos eso dijo el Papa Francisco, quien se ha dedicado durante su pontificado a dar la idea de que la Iglesia Católica está cambiando y adaptándose a las necesidades de sus feligreses antes de que otras religiones conquisten su fe.
De acuerdo con el portal de noticias EOnline, el Papa argentino consolaba a un niño por la pérdida de su perro y le aseguró que “algún día veremos a nuestros animales en la eternidad de Cristo”. Y añadió “el paraíso está abierto para todas las criaturas de dios”.
Estas declaraciones, contrarias a lo que la propia iglesia católica había asegurado con firmeza -que los animalitos no tienen alma- ya fueron puestas en duda por teólogos y especialistas como Charles Camosy quien dijo a The New York Times que es difícil saber qué quiso decir el Papa, ya que "habló en un lenguaje pastoral que no se supone que los académicos diserten".
Si, los perros van al cielo.
Fuente: http://www.tiempo.hn/
No hay comentarios:
Publicar un comentario