No es lo que esperamos apreciar en la calle, pero ver a un perro que acaba de sufrir un accidente es realmente triste. Queremos ayudarlo y no sabemos cómo.
La doctora Luz Marina Vidal, de la ‘Clínica Veterinaria Surco’ aconseja, en principio, guardar la calma, pues el perro intuye la desesperación de las personas, se atemoriza y al estar herido podría morder como una medida de protección. “Hay que acercarse lentamente, manipularlo con suavidad y evitar que haga movimientos bruscos que agraven sus heridas”, señala.
En lugar de cargarlo, se sugiere colocar al animalito sobre una tablilla o manta y sacarlo del lugar del accidente. “Lo ideal es que sea trasladado en una superficie plana que pueda ser cogida por sus cuatro esquinas, formando una especie de camilla. Esto porque casi siempre hay fracturas en las extremidades y lo mejor es que ningún objeto toque los miembros lesionados”, recalca Vidal.
De evidenciarse una hemorragia, se tiene que vendar la zona. Pero si -por ejemplo- el sangrado es intenso en las heridas de las patas, hay que amarrar con firmeza una liga o un lazo por encima del corte. Enseguida el flujo disminuirá. También es importante levantar el hocico del animal, a fin de que el cuello quede estirado y la respiración no se dificulte hasta que llegue a manos del médico veterinario.
Por: Mariela Celis
Fuente: http://trome.pe/
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