domingo, 27 de abril de 2014

Los perros más legales

 
La Unidad Canina de la Policía Local investigó durante el año pasado una treintena de casos de mordeduras de perro que causaron lesiones leves o graves a personas de dentro y fuera de su entorno. Además de la persecución del tráfico de drogas, los agentes que componen la brigada vigilan que los dueños de los perros, sobre todo aquellos de razas peligrosas, cumplan con lo que exige la normativa. Durante el año pasado, pusieron 102 denuncias por diferentes motivos, como carecer de licencia municipal de animales potencialmente peligrosos, incumplir la obligación de concertar un seguro de responsabilidad civil, no vacunar al animal, no llevar al perro atado o por pasear con él sin el preceptivo bozal.
 
 
Son algunas de las exigencias legales para prevenir mordeduras y ataques como el que sufrió Alicia Martínez, de 18 años, este verano cuando se dirigía a su casa en las afueras de Muxtamel. La joven asistió a la presentación de los dos nuevos perros que pasarán a integrar la Unidad Canina de la Policía Local. Entre ellos está Koldo, un rottweiler de 18 meses, con el que ha estado recibiendo terapia para eliminar la fobia a los perros que sufría tras el ataque, como ya avanzó este diario. Este can se destinará a dar terapia en casos como el de Alicia, quien ayer demostró cómo ha perdido el miedo dando de comer a Koldo y jugando con él en las instalaciones de la brigada. El responsable de la unidad, Sergio Melgares, indicó que será la primera unidad de la Policía Local de toda Europa que preste estas terapias.
 
 
Lía, un pastor belga ilinois de 4 meses, también ha pasado a formar parte de la unidad y se dirigirá, como los otros seis perros de la brigada, a la detección de estupefacientes. El concejal de Seguridad, Juan Seva, destacó que los perros de la Unidad Canina «son adiestrados para la seguridad ciudadana, detección de drogas, así como para tareas de búsqueda de personas sepultadas y rastreo de materiales explosivos». Los canes patrullan por toda la ciudad, sobre todo en los entornos de centros de enseñanza y parques, donde realizan controles preventivos desde hace tres años. Fruto de esos controles, además de intervenir droga, se han impuesto más de un centenar de denuncias por incumplir la normativa sobre perros e instruido 30 atestados por mordeduras.
 

Fuente: http://www.diarioinformacion.com/

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