No está demostrado científicamente, pero la experiencia de años nos indica que muchos animales son capaces de predecir los terremotos, incluso días antes de que ocurran. Uno de ellos son los perros, capaces de percibir cualquier sutil vibración de la tierra.
Gracias a este poder, los canes son utilizados a menudo como ayuda en los sistemas de prevención de temblores de Japón y China, junto a otras sofisticadas tecnologías. Los estudios realizados afirman que, muy probablemente, los perros son capaces de percibir terremotos superiores a 6 grados en la escala de Ritcher con horas de antelación.
Cuando los perros comienzan a percibir un seísmo, se muestran inquietos, ladrando en exceso, corriendo de un lado a otro e incluso huyendo del lugar. Es lo que nos demuestran casos como el del impactante tsunami que azotó Indonesia en 2004, donde los testigos afirmaron percibir comportamientos extraños en los animales de la zona.
A raíz de acontecimientos de este tipo, han ido surgiendo numerosos estudios acerca de esta extraordinaria capacidad que parecen poseer los canes. Los investigadores creen que puede deberse a su don para captar sonidos demasiado agudos para el oído humano, por lo que perciben los rumores producidos por el movimiento terrestre.
También se dice que estos animales pueden percibir las ondas electromagnéticas que se emiten previamente a un terremoto. Su sensibilidad para captar estas cargas es espectacular, pues pueden hacerlo con horas de antelación. Ellos son conscientes de numerosos detalles que pasan desapercibidos para nosotros.
No son éstos los únicos animales capaces de predecir seísmos; de hecho, hay otras especies que pueden hacerlo semanas antes de que se produzcan los movimientos terrestres. Un ejemplo son las carpas, que incluso son utilizadas para calcular la intensidad de los terremotos. Un perro, por el contrario, nos avisa con el tiempo justo para huir de la zona.
Fuente: http://www.mundoperros.es/
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